la cruz de Carlos III, que Somoza jamás quiso llevar, diciendo que le era vergonzosa una condecoración dada por un Ministro que no tenía minguna. Al caer la Constitución (1823), fué preso y llevado de Piedrahita á Avila á la cárcel pública, cárcel que él había hecho mejorar siendo jefe político; pero eran tantos los presos cuando él y su hermano entraron, que no les tocó otro albergue que la carbonera del edificio. De allí salieron á los cuatro meses. Su hermano había cegado y él había contraído un penoso mal de piedra, y no fueron por cierto de los peor librados entre los que salieron de las garras del cura Merino. Otra causa militar le formó posteriormente el general San Juan, de Badajoz, pero tampoco tuvo otras resultas que la de una prisión dilatadísima. En 1834 fué Somoza nombrado pro curador á Cortes por Avila, y en 1836 diputado por la misma para las Constituyentes. En 1838 no pudo ser senador porque no tenía la renta. Siempre estuvo en compañía de su hermano mayor, Juan Somoza, que murió en 1829, y desde entonces siguió en la compañía de su hermana María Antonia, de edad de setenta y tres años. Residió en Piedrahita, habitando la casa y el cuarto en que nació. Escribió mucho en verso y prosa, é imprimió: un cuaderno de Poesías (Sevilla, 1832); otro con igual título (Madrid, 1834), y un suplemento á los dos (íd., 1835). En prosa dió á las prensas: las Memorias de Piedrahita (1837); Carta sobre el duelo, y las Obras de José Somoza, artículos en prosa, nueva edición corregida y aumentada (Madrid, 1842, en 8.°). En los Apuntes para una biblioteca de escritores españoles contemporáneos, por Eugenio de Ochoa (París, t. II, págs. 687 á 703), se publicó una autobiografía de Somoza y estos escritos suyos: Memorias de Piedrahita (fragmento en prosa); Mi primera sensación benéfica (íd., íd.); Usos, trajes y modales del siglo XVIII (ídem, íd.); tres sonetos; una oda; una canción; otra poesía A una novia en el dia de la boda, y un madrigal. La Biblioteca de autores españoles de Rivadeneira (t. LXVII, págs. 451 á 479) reprodujo la citada autobiografía, y publicó, con no. tas, estos trabajos de Somoza: en prosa, Una mirada en redondo á los sesenta y dos años; Mi primera sensación benéfica (fragmento); Usos, trajes y modales del siglo XVIII (id.); La duquesa de Alba y Fray Basilio; El retrato de Peiro Romero; La justicia en el siglo pasado; La vida de un diputado á Cortes; El risco de la Pesqueruela; El árbol de la Charanga; Las funciones patrióticas en un pueblo de Castilla en 1835. Poesías: treinta sonetos; tres odas; dos epistolas; siete canciones; una cantilena; dos madrigales; cuatro romances; cuatro epigramas; un epitalamio: un himno fúnebre; un cuento; una trova en octavas reales, y las seis composiciones tituladas: A una señora que me consoló en mi infortunio; A Cecilia; Descansa en paz; En el album de doña María S. del Acebal; A una coqueta; Traducción de un fragmento del Orlando de Ariosto. SOMOZAS: Geog. Ayunt. formado las por pa. rroquias de Santa María de Recemel y Santiago Seré de Somozas, con la cab. en la aldea de Garita de la parroquia de Santiago, p. j. del Ferrol, prov. de la Coruña, dióc. de Mondoñedo; 3492 habits. Sit. á la izq. de la carretera del Ferrol á Puentes de García Rodríguez, en la región montañosa en que nacen los ríos Jubia y Nera. Cereales, hortalizas y frutas; cría de ga. nados; ferrerías. V. SANTIAGO SERÉ DE SoMOZAS. 11 SOMPESAR (de son por sub, debajo, y pesar): a. Levantar una cosa como para tantear el peso que tiene ó para reconocerlo. SOMPUIS: Geog. Cantón del dist. de Vitry-leFrançois, dep. del Marne, Francia; 15 munici pios y 3600 habits. - A SON DE PARIENTES, BUSCA QUÉ MERIENDES: ref. que persuade á no darse al ocio en confianza del socorro ajeno, -¿A SON DE QUÉ?: exp, ¿A QUÉ SON? - BAILAR uno Á CUALQUIER SON: fr. fig. y fam. Moverse fácilmente de cualquier afecto ó pasión. BAILAR uno AL SON QUE LE TOCAN: fr. fig. y fam. Acomodarse á los tiempos y circunstancias; hacer lo que se quiere que haga. - BAILAR SIN SON uno: fr. fig. y fam. Estar tan acelerado y metido en una cosa, que no ne cesita de ningún estímulo exterior. de. EN SON: m. adv. De tal modo, ó á manera - NO VENIR EL SON CON LA CASTAÑETA: fr. fig. y fam, con que se explica la desproporción - QUEDARSE AL SON DE BUENAS NOCHES: fr. - SIN SON: m. adv. Sin razón, sin fundamento. SON: prep. insep. SUB. SON: Geog. Aldea de la parroquia de Santa pequeña ensenada del Son, con fondo de 6,7 Sudán central, sit. en el curso superior del Ba- TOMO XIX Aldea de la parroquia de Santa María de Son, ayunt. de Navia de Suarna, p. j. de Fonsagrada, prov. de Lugo; 70 habits. V. SANTA MARÍA DE SON. - SON 6 SONE: Geog. Río de la India, en el Baguelkand y el Behar. Lo forman dos corrientes que se unen en el principado de Riva del Baguelkand, corre hacia el N. O., recibe las aguas del Yohila, recoda hacia el E. N. E. por el S. de los montes Keimur, continúa por la parte S. del Mirzapur, prov. de Benares, recibiendo importantes afl. por la orilla dra., forma frontera entre la prov. de Patna y el Chota Nagpur, entra en el Behar, donde separa el dist. de Chahabad de los de Gaya y Patna, cruza la carretera de Benares al Bengala, y con dirección al N. E. va á desembocar en la orilla dra, del Ganges, cerca de Dinapur, en los 25° 41' 30" lat. N., y 88° 33′ long. E. Madrid. Su curso es de 740 kms., y la anchura de su cauce, en la parte inferior, llega á 5 kms., aunque con escasa cantidad de agua en la estación seca. En Dheri, aldea sit. á la izquierda del Sone, empiezan dos grandes canales: el Gran Canal del Oeste al N. y O., con sus derivados los canales de Arrah y de Baxar, y el Gran Canal del Este en la orilla dra., del que se destaca el Canal de Patna. | Río de la India, en el dist. de Balagat; pasa al N. de Lany y des agua en la dra. del Bagh á los 100 kms. de curso. - SON ANGLADA: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Palma, prov. de Baleares; 310 habits. - SON BENNASSAR: Geog. Caserío del ayuntamiento y p. j. de Inca, prov. de Baleares; 65 habits. - SON BORDILS: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Inca, prov. de Baleares; 70 habits. Estación en el f. c. de Palma á Manacor, entre Inca y Sineu, y empalme del ramal á La Puebla. -SON BRU: Geog. Arrabal del ayunt. de Puigpuñent, p. j. de Palma, prov. de Baleares; 789 habits. -SON CORSO: Geog. Barriada del ayunt. de Andraitx, p. j. de Palina, prov. de Baleares; 157 habits. -SON DEL PUERTO: Geog. Lugar con ayuntamiento, p. j. de Aliaga, prov. y dióc. de Teruel; 185 habits. Sit. cerca de la sierra de San Just y cereales, legumbres y patatas. del pueblo de Valdeconejos. Terreno montuoso: -SON ESPANYOL: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Palma, prov. de Baleares; 395 habits. - SON ESPANYOLET: Geog. Caserío del ayuntamiento y p. j. de Palma, prov. de Baleares;56 habits. - SON GARI: Geog. Caserío del ayunt. de Son Servera, p. j. de Manacor, prov. de Baleares; 105 habits. draitx, p. j. de Palma, prov. de Baleares; 315 SON JOFRE: Geog. Caserío del ayunt. de An habits. - SON LLULL: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Palma, prov. de Baleares, 340 habits. - SON MAGRANER: Geog. Caserío del ayuntamiento y p. j. de l'alma, prov. de Baleares; 499 habits. - SON MAS: Geog. Caserío del ayunt. de Santa Margarita, p. j. de Inca, prov. de Baleares, 57 habits. - SON MAYORAL: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Palma, prov. de Baleares; 123 habits. - SON MONSERRAT: Geog. Caserío del ayuntamiento y p. j. de Palma, prov. de Baleares; 113 habits. - SON MUDA: Geog. Caserío del ayunt. de Felanitx, p. j. de Manacor, prov. de Baleares; 140 habits. - SON NEGRE: Geog. Caserío del ayunt. de Felanitx, p. j. de Manacor, prov. de Baleares; 58 habits. - SON ORLANDÍS: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Palma, prov. de Baleares; 59 habits. - SON PIERAS: Geog. Aldea del ayunt. de Calvia, p. j. de Palma, prov. de Baleares; 94 ha bitantes. - SON PRIM: Geog. Caserío del ayunt. de Andraitx, p. j. de Palma, prov. de Baleares; 169 habits. - SON RAPINYA: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Palma, prov. de Baleares; 380 habits. - SON ROCA DE LA HUERTA: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Palma, prov. de Baleares; 67 habits. - SON ROCA DE LA VILETA: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Palma, prov. de Baleares; 116 habits. - SON SANT JUAN Ó SON ARROSA: Geog. Caserío del ayunt. de Sancellas, p. j. de Inca, provincia de Baleares; 136 habits. -SON SARDINA: Geog. Caserío del ayunt. y p. j. de Palma, prov. de Baleares; 1152 habits. -SON SERRA: Geog. Caserío del ayunt. y partido judicial de Palma, prov. de Baleares; 98 habits. Caserío del ayunt. de Santa Margarita, p. j. de Inca, prov. de Baleares; 52 habits. que - SON SERVERA: Geog. V. con ayunt., al están agregados el arrabal de Vila Nova y varios caseríos, p. j. de Manacor, prov. de Baleares, isla y dióc. de Mallorca; 2704 habits. Sit. en la costa oriental de la isla, al S. E. de Artá, al pie de un monte. Terreno montuoso en parte; higos, naranjas, cereales y hortalizas; canteras de piedra. Aduana marítima de cuarta clase. La playa, en la que desagua un arroyo, se extiende hacia la punta Rotja, y en ella hay un caserío, que es la marina de la v. - SON TONI PETIT: Geog Caserío del ayuntamiento de Andraitx, p. j. de Palma, prov. de Baleares; 111 habits. SONA: Geog. Lugar de la parroquia de Santiago de Partovia, ayunt. y p. j. de Carballino, prov. de Orense; 53 habits. - SONA Ó SOHNA: Geog. C. del dist. de Gurgaon, prov. de Delhi, Penyab, India, sit. al S. S. E. de Gurgaon, al pie de los montes Mevati; 7 500 habits. Fábs. de vidriado, é importante comercio local de granos y azúcar. SONA: Geog. Pueblo cab. del dist. del mismo nombre, prov. de Veraguas, dep. de Panamá, Colombia, sit. entre los ríos Tobalico, Tribique y San Pablo, y á 20 m. de alt. 3 500 habits. Ganado vacuno y de cerda. SONABIA: Geog. Punta en la costa de la provincia de Santander, p. j. de Castrourdiales, entre el puerto de este nombre y el de Laredo. Lugar del ayunt. y p. j. de Castrourdiales, prov. de Santander; 60 habits. SONABLE (del lat. sonabilis): adj. Sonoro ó ruidoso. ... un tono bajo, reposado, y muy SONABLE, que hacia resonar la iglesia, donde rezaba. Lazarillo de Tormes. -SONABLE: SONADO; famoso, que tiene fama y nombre en la acepción común, tomandose tanto en buena como en mala parte. y seyendo muy SONABLE esta segunda guerra, ocurrieron de todas las partes muchos nobles mancebos. PEDRO LÓPEZ DE AYALA. SONADA: f. SONATA. SONADA: ant. SON; sonido que afecta agradablemente al oído, con especialidad el que se hace con arte. SONADERA: f. Acción de sonarse las narices. ... aquí plañían todas con ella, y andaba una SONADERA de narices que se hundia la cuadra. QUEVEDO. SONADERO: m. Lienzo ó pañuelo con que se suenan las narices. SONADO, DA (de sonar): adj. FAMOSO; que tiene fama y nombre en la acepción común. A vos el vanaglorioso, GONGORA. SONADOR, RA: adj. Que suena ó hace ruido. entraron dos viejos de bayeta con anto - SONADOR: m. SONADERO, - SONADOR: Geog. Río de la isla de Puerto Rico. Es un afl. por la orilla izq. del río Culebrinas, al que se une cerca de San Sebastián. tabla se labra, bien con la azuela ó con el cepillo, y mejor con las sierras mecánicas; los extremos que han de unirse se adelgazan, y después de unidos se cosen con alambre ó se clavan; tres listones, uno central y dos extremos, formando aro ceñido y clavado á la tabla de modo que resul ten equidistantes, sirven de refuerzo al instru mento, el que en sentido de dos diámetros, á ángulo recto, lleva ocho cajas rectangulares alar gadas en sentido de la circunferencia, es decir, una caja en cada extremo de uno de los dos diá metros, en cada uno de los espacios que dejan los listones; un alambre lleva en cada vacío dos SONAGUERA: Geog. Dist. del dep. de Colón, Honduras, Comprende los municip. de Sonague-do la tabla ó entre ésta y los listones, y se suje sonajas ensartadas, cuyo alambre taladran. pasa ra y Tocoa, con 1 500 habits. El pueblo de Sonaguera tiene 900 habits., y su término produce abundante tabaco de clase superior. SONAI: Geog. Río del Asam. Nace en los montes Luchai; corre hacia el N., separado al E. de la cuenca del Tipai por los montes de Ruban; baña á Sonai Bazar, atraviesa el paralelo 24 latitud N., entra en el dist. de Kachar, pasa por Moniar Jal, recibe por la izq. el Kakni, y á los 170 kms. de curso vierte sus aguas en el Barak. C. del dist. de Ahmednagar, prov. de Deján, Bombay, India, sit. en una fértil llanura, al N. de las montes Nagar; 5800 habits. C. muy comercial, dividida por el mencionado río en dos barrios: el Peth, mercantil, y el Kasba, agrí cola. SONAJA (de sonar): f. Instrumento rústico hecho de una tabla delgada, ancha como de cuatro dedos, puesta en círculo, con unos agujeros más largos que anchos, con igual proporción. En medio de ellos se ponen unos alambres con rodajas de metal, para que, dando unas con otras, hagan el son. Manéjase regularmente con la mano derecha, y se da con las rodajas sobre la palma de la izquierda. ..., tomó Preciosa unas SONAJAS, al son de Pero Alonso, el de Barajas, TIRSO DE MOLINA. Si tienen por voto nacional los gritos de la canalla de los pueblos, que al son de los panderos y SONAJAS de las ramerillas pagadas para ello, salían á recibir al Rey pidiéndole cadenas, etc. QUINTANA. -SONAJA: Art. y Of. La construcción de so najas y panderos forma hoy una industria espe- mismas atando los extremos, operación que, tal de un mismo árbol, hasta que habiendo perdido - SONADO: Divulgado con mucho ruido y ad- man también sonajas; más tarde, cuando ya supo miración. Yo creo que si esto pasa Adelante, ha de ser fuerza Tomar una muy SONADA RAMÓN DE LA CRUZ. tan los extremos del alambre dando vuelta al listón ó bien con un pequeño tirabuzón que le impida salirse; las sonajas son de hierro, cuadradas, ochavadas ó circulares; un agujero circular colocado entre dos sonajas sirve para pasar por él el dedo pulgar para sonarla. Lo mismo se construyen las panderetas, sin más que cubrir una de las bases del cilindro por una piel delga. da curtida en pergamino, llamada parche, la que se sujeta formando en ella un reborde de la misma piel en todo su contorno y comprimiendola entre la tabla y el aro, ó bien, si no lleva refuerzo, pegada al aro mismo; esta piel hay que encerarla por el exterior calentándola un poco para que absorba la cera y no sea tan fácil de romper, pudiendo pintarla también al óleo. Las pande retas de lujo llevan pinturas de los buenos maes tros, y los aros son de latón, de cobre, plaqué, plata, etc., y las sonajas de plata, estando además adornadas con trabajos de pasamanería tejidos con cascabeles, empleando colores vivos en las combinaciones de sus órdenes; también se hacen sonajas y panderas cubiertas por ambos lados con papeles de cartulina ó cartón fino, que se destinan á cajas de dulces, y muchas de las cuales llevan un espejo, estando profusamente adornadas en todo su contorno; pero éstas ya no son verdaderas sonajas ni panderas, sino imitación de las segundas. El comercio de sonajas se limita hoy en nuestro país á determinadas épo cas, como son las fiestas de Navidad y Carnaval, formando en estas últimas un instrumento indispensable de las comparsas, para acompañar a las bandas que las forman. -SONAJA: Bot. Nombre vulgar empleado en teneciente á la familia de los Borragináceas, y las islas Canarias para designar una planta per cuya denominación sistemática es Echium plantagineum L. SONAJERO (de sonaja): m. Instrumento pe dajas ó cascabeles. Sirve para el divertimiento queño, con su cabo, y en lo alto de él unas ro de los niños, tocándolo, y se suele hacer de va rias figuras y materias. ... un SONAJERO para niños, ocho maravedís. Pragmática de tasas de 1680. que menea (el niño) el SONAJERO; que estrena los andadores y la pollera.... todas son gracias que es necesario atribuir y recompen sar á los desvelos de la madre alquilona. BRETÓN DE LOS HERREROS. - SONAJERO: Art. y Of. La fabricación de sonajeros es hoy un ramo de bisutería, tanto fina ó de plata como falsa, que ha tomado bastante desarro Ilo, habiéndose abandonado las antiguas formas por otras de mejor gusto; generalmente un sonaje ro se compone de una caja de hoja muy delgada de metal, formada de dos partes ó valvas que se unen á soldadura después de haber colocado en su in terior unas esferillas huecas de latón ó unos cas cabeles; varios agujeros circulares de menor diámetro que las esferillas, para que no se puedan salir, permiten la emisión clara del sonido, que se produce al agitar el sonajero y chocar contra el las esferillas; en el exterior se cuelgan unos cas cabeles de plata ó del metal de que aquél está construído, pendiendo de unas anillitas de alanı bre de la misma materia, que en la superficie y que forman el cuerpo del sonajero están labiaen los puntos más salientes se sueldan; las hojas das por estampación en una máquina compuesta biela que va articnlada con la estampa; cintas de un cilindro de vapor, cuyo énbolo mueve una hoja metálica, que al propio tiempo que sufre en que va colocada la contraestanipa reciben la la estampación queda cortada, á cuyo efecto la estampa termina en su contorno por un saca bocados que se corresponde con una ranura de la contraestampa; también hay máquinas movidas á brazo por una manivela colocada en un volante de gran radio, cuyo eje está acodado ó lleva una excéntrica, á la que, ó al codo del eje, va unida la biela que pone en movimiento la estampa. El cuerpo metálico del sonajero termina en una especie de cabo cilíndrico, en el que se introduce á presión una empuñadura recta de marfil ó hueso, para terminar la obra. También se hacen sonajeros muy bastos, reducidos á un aro de cartón de unos 6 á 8 centímetros de diámetro por 3 de altura, formando un cilindro que se cierra por ambos lados con parches de pergamino delgado; un junco ó espadaña delgado entra por la superficie lateral del cilindro, à la que se suelda con engrudo, y dos travesaños para que no pueda desprenderse fácilmente, en el interior se colocan cuatro ó seis granos gruesos de arena, forrándolo todo, excepto los parches, con papel de colores. SONAN: Geog. Aldea de la parroquia de San Salvador de Insoa, ayunt. de Taboada, p. j. de Chantada, prov. de Lugo; 81 habits. SONANDE: Geog. Lugar de la parroquia de Santiago de Cibea, ayunt. y p. j. de Cangas de Tineo, prov. de Oviedo; 84 habits. SONANTE (del lat. sonans, sonantis): p. a. de SONAR. Que suena. zumba SONANTE á lo lejos sin más trabajo, á mi parecer, que el haber de contar y recontar al fin del mes los soNANTES doblones que el público desinteresado tiene la bondad de depositar en cambio del papel en los arcones periodísticos de una empresa, etc. -SONANTE: adj. SONORO. LARRA. Apenas ha caído el telón, empiezan á prepa rarse los violines,... cada arco parece que arranca un bostezo á las SONANTES cuerdas, etc, HARTZENBUSCH. -SONANTE: f. Germ. NUEZ; fruto del nogal. Compónese de una corteza herbácea, fibrosa, dura y caediza, que contiene un cuerpo oval de una pulgada de largo, sumamente duro, escabroso, de color pardo claro, compuesto de dos mitades que encierran la parte comestible, que es blanda, cavernosa, de gusto craso y agradable, y está cubierta de una telilla parda. SONAPAC: Geog. Río de Méjico, tributario del río del Corte ó Coatzacoalcos, á 9 kms. al E. del pueblo de Santa María Chimalapa. SONAR: Geog. Río de la India, en el Gondvana. Nace en los montes Vindhyas y en la frontera del dist. de Sagar; corre hacia el N. E. por Rehli y Garhakota, recibe las aguas del Biairmi, y pocos kms. aguas abajo se une el río Ken, por orilla izq., á los 200 kms. de curso. SONAR (del lat. sonare): n. Hacer ó causar ruido una cosa. ... SONABAN en su cama unas voces, y golpes de látigo, yo levanté la cabeza, y dije: ¿Qué es eso? Y apenas me descubri, cuando con una maroma me asentaron un azote. QUEVEDO. Tal SUENA VOZ confusamente ronca, Que apenas se apercibe, ni se encubre; Porque oido el terror, que el orbe espanta, Neutralidad la rompe en la garganta. MIGUEL DE SILVEIRA. - SONAR: impers. Susurrarse, esparcirse rumores de una cosa. U. m. c. r. Aunque en la ciudad SE SUENA BRETÓN DE LOS HERREROS. - LO QUE ME SUENA, ME SUENA: expr. fig. y fam. con que uno explica que se atiene á la sig nificación obvia y natural de las palabras, y no á interpretaciones sutiles. - SONAR BIEN ó MAL: fr. fig. Parecer bien, ó mal. SONARGAÓN: Geog. Antigua cap. del Bengala oriental, y hoy, con el nombre de Painam, aldea del dist. y prov. de Dacca, sit. en el Doab, entre la orilla dra, del Meghna y la izquierda del Lajmia, afl. izquierdo del Daleçari. Tiene fama por sus muselinas. SONATA (del ital. sonată): f. Composición de música instrumental de trozos de vario carácter y movimiento. Tómala (mi flauta), vé á la playa, toca alli la SONATA que yo enseñé á Dafnis, y que Dafnis te enseñó. VALERA. SONBARSA: Geog. Lugar del dist. de Ballia, prov. de Benarés, North West Prov., India, cerca de la confl. del Gogra con el Ganges; 9000 habits. Es una aglomeración de aldeas pertenecientes al maharayá de Dumraon, en Behar. SONCILLO: Geog. V. cab del ayunt. de Valle de Valdebezana, p. j. de Sedano, prov. de Burgos, 496 habits. Estación en el f.c hullero de La Robla á Valmaseda, entre Cabañas de Virtus y Robredo Ahedo. SONCINO & SONZINO: Geog. C. de la prov. de Cremona, Lombardía, Italia, sit. cerca de la orilla dra. del Oglio y en el tranvía de vapor de Brescia á Lodi; 6 000 habits. Tejidos de seda; fab. de pastas alimenticias y otros artículos. Castillo del siglo XV; bonita torre de la Casa Ayuntamiento. Es lugar citado en la Historia, porque en él pactaron la paz en 1317 los guelfos y gibelinos de Toscana. Sforza venció á los milaneses en 1440, y fué tomado por el príncipe Eugenio y luego por el duque de Vendome en 1720. SONCO (del gr. σóyкos, cerraja): m. Bot. Género de plantas (Sonchus) perteneciente á la familia de las Compuestas, subfamilia de las ligulifloras, tribu de las chicoráceas, cuyas espe cies habitan en la Europa meridional y especialmente en la región mediterránea, y son plantas herbáceas, ramificadas dicotómicamente, con las hojas alternas, sentadas y abrazadoras, las inferiores más largas y angostadas en la base, todas dentadas ó accinadopinnatifidas, con las cabezuelas agregadas y las flores de color amarillo pálido; cabezuelas multifloras homocarpas, con el involucro aovado formado por escamas empi7arradas, y el receptáculo plano, con hoyitos y sin pajas; corolas todas liguladas; aquenios uniformies, sin pico, planocomprimidos, con arrugas transversales y truncados en el ápice; vilanos todos iguales, formados por varias series de pelitos soldados por su base en varios grupos ó ha cecillos. SONCORO: m. Bot. Género de plantas (Sonchorus) perteneciente á la famila de las Amomáceas, cuyas especies habitan en la India oriental, y son plantas herbáceas con rizoma perenne tuberoso, hojas dispuestas en dos series enteramente verdes, con los pecíolos envainadores, y escapos sencillos, laterales ó centrales terminados por una espiga erguida apenachada, con las bracteas dispuestas en dos series y rara vez cóncavas; cáliz tubuloso y hendido en la parte anterior; corola con el tubo alargado y filiforme, y el limbo con las lacinias exteriores estrechas, iguales entre sí, las laterales patentes, la posterior ahorquillada y las interiores mucho más grandes con labelo plano; filamento corto, aquillado, y la antera mocha, provista de una crestita bífida que corresponde á la prolongación del conectivo; ovario ínfero, trilocular, con óvulos numerosos horizontales y anátropos insertos en los ángulos centrales de las celdas; estilo filiforme y estigma urceolado pestañoso, El fruto es una cápsula trilocular que se abre en tres valvas con dehiscencia loculicida; semillas numerosas y con arilo. SONDA (del lat. sub, debajo, y unda, onda): f. Acción, ó efecto, de sondear. SONDA: Barrena que se hace penetrar en el terreno á profundidad considerable para averi. guar la naturaleza de las capas que lo compo nen. - - IR CON LA SONDA EN LA MANO: fr. fig. Considerar muy despacio lo que se hace, y proceder con exactitud y madurez. - SONDA: Ing. Este aparato sirve para investigar la naturaleza de las diversas clases de terrenos que se encuentran bajo la superficie del suelo. Hácese uso de la sonda en la investigación de aguas, en la de minas, en algunos trabajos geológicos, y más particularmente en las operaciones preliminares à la cimentación de una obra de construcción, sobre todo cuando ha de tener cierta importancia y cuando el terreno sobre que se trata de fundar es desconocido en cuanto a su resistencia y compresibilidad, no habiendo en los alrededores suficiente número de construcciones que puedan arrojar luz sobre las condiciones indicadas; así, los sondeos adquieren, por lo general, mucha más importancia en el campo que en las grandes poblaciones, en las que suele ser perfectamente conocido el subsuelo, y en las que pueden simplificarse mucho os trabajos de sondeo, y hasta con frecuencia se suprimen. En cambio en el campo, y en construcciones de cimentación difícil, como en la de los puentes, por lo general son precisos minuciosos sondeos con aparatos complicados y cuyo coste eleva considerablemente el presupuesto de la obra. Siendo objeto de otro artículo (V. SONDEO) el detallar las operaciones necesarias para la investigación de la diversas capas del subsuelo, vamos á ocuparnos aquí tan sólo del aparato con el cual se ejecutan, es decir, de la sonda. Podemos, y debemos distinguir, en realidad, dos cla ses de sondas que, aunque en principio no difie- Operadores. Son muy variables en su forma, ren, son totalmente diversas en los detalles; las y puede decirse que en cada caso convendría uno dos sondas á que nos referimos podría llamarse determinado, según sean las rocas que haya que las pequeña y gran sonda, tanto por las diferen- atacar. En efecto, el operador ó útil es la parte cias en el tamaño, ó más bien, en el número de de la sonda que verifica directamente la perfora partes que las componen, como por las profunción, y es evidente que su forma ha de estar en didades tan diversas á que una y otra permiten llegar respectivamente; pues mientras las sondas pequeñas permiten profundizar poco más de me tro y medio, las de la segunda categoría pueden alcanzar hasta unos 20 metros. A la primera categoría pertenecen la sonda ordinaria y la sonda de Palissy; á la segunda la de Dégousée, la sonda de cuerda y polea, y las sondas huecas en general. Sonda ordinaria 6 sonda de percusión. - Es sumamente sencilla, pues sólo consta de una barra de hierro dulce de unos 2 metros de altura y una sección de unos 9 centímetros cuadrados; por lo general esta sección es de forma cuadrada (cuyos lados son, según lo dicho, 3 centímetros); por su parte interior va aguzada y provista hasta una cierta altura de unas puntas salientes y dirigidas hacia arriba á la manera de un arpón; esta parte, que es la que se clava en el terreno, y necesita, por tanto, ser más resistente, suele estar acerada; la parte superior de la sonda termina en una cabeza plana sobre la que se actúa con un martillo ó mazo para clavarla en el terre no, y lleva además un ojo que sirve para introducir una barra horizontal cuando quiere extraerse la sonda. Los salientes del arponado tienen por objeto que, sin dificultar gran cosa la introducción de la sonda en el terreno, por estar dirigidos hacia arriba y oblicuamente á la barra de sonda, queden al sacar ésta adheridas á los citados salientes algunas partículas de las capas perforadas. Sonda de Palissy. - Así como la que acabamos de describir se maneja á percusión, con la de Palissy se trabaja haciéndola girar sobre un eje vertical. La altura de este aparato es también de unos 2 metros, y está constituído asimismo por una barra de hierro, pero cuya parte inferior va provista de una mediacaña (fig. 1) que en su extremo se alabea y adelgaza para formar un gusanillo análogo al de las barrenas de carpintero. Como la mediacaña que hemos dicho abre a C y 3 Figs. 1, 2, un taladro de mayor diámetro que el de la barra b, puede verificarse el giro sin que ésta roce contra las paredes del referido taladro, y por tanto sin que se dificulte la operación por dicho rozamiento. Lleva esta sonda cerca de su extremo superior un doble mango ó travesaño horizontal que sirve para manejarla, y una cabeza más ancha que por su peso contribuye á que se clave la sonda, y que también puede servir para recibir los golpes dados con un martillo á fin de facilitar la hinca. Tanto la sonda de Palissy, como la primeramente descrita, sólo pueden emplearse en terrenos poco duros, á lo más en margas endurecidas y calizas blandas. Sonda de Dégousée. - Así como las dos ante. riormente descritas tienen un empleo limitado solamente á perforaciones de menos de 2 metros, la que nos ocupa puede alcanzar profundidades hasta de 20 metros, según indicamos al principio. Sin embargo, tanto por el coste de las operaciones como por no ser necesario profundizar tanto en la mayoría de los casos, es menos conún el empleo de la sonda de Dégonsée que el de las otras dos de que nos hemos ocupado anteriormente. Componese aquélla en esencia de cuatro partes: el operador ó útil, la cabeza de sonda y las varillas y demás órganos intermedios, y finalmente los accesorios. relación con la naturaleza de la materia a través de la cual ha de abrirse paso; así, si la roca es muy dura, pero frágil, es decir, no resiste á los choques, convendrá emplear útiles que por su forma se presten á sufrir los choques, para que puedan ser soltados desde cierta altura, viniendo con sólo su peso á chocar contra la roca que trata de perforarse; si ésta es blanda, convendrán, por el contrario, instrumentos más agudos y de forma apropiada para producir el efecto deseado sólo por su giro. De aquí que puedan considerarse dos clases de útiles: los de perforación y los de giro; además, hay otros que son á manera de bombas. Los primeros se designan, por lo general, con el nombre de trépanos, y los segundos con el de barrenos. Los trépanos pueden ser sencillos ó compuestos, y todos ellos están terminados por una ó varias cuchillas casi rectas (fig. 2) ó cuyo filo sigue una línea ligeramente convexa (fig. 3). Estos cuchillos, al chocar con el filo contra la roca, la quebrantan en el sentido de una línea, y dando los necesarios golpes con el filo en direcciones diferentes, para lo cual hay que hacer que á cada vez vaya girando un poco la sonda sobre su eje vertical, la roca será completamente quebrantada con las sucesivas percusiones y se conseguirá el objeto apetecido, de aquí la forma dada á estas cuchillas. Los trépanos sencillos ó formados de una sola pieza suelen afectar la forma de una barrena ordinaria de las empleadas en la explotación de canteras, ó bien las indicadas en las figs. 2 y 3; la primera tiene tres cuchillas: a, b, c; la central, c, más larga que las otras dos, y que, por decirlo así, las prepara el trabajo, abriendo un taladro de más pequeño diámetro; el trépano de la fig. 3 consta de dos cuchillas aa-a'a y bb – b'b', cruzadas que trabajan al mismo nivel; otros trépanos tienen á veces formas más complicadas. Los trépanos compuestos de varias piezas llevan sobre los anteriores la ventaja de que la rotura de una cuchilla tiene fácil remedio, lo que no ocurre con los sencillos, pero en cambio son más complicados, más caros y más delicados. Se componen de varias cuchillas independientes, sujetas con tornillos ó cuñas á una armadura rectangu lar de hierro, la cual forma cuerpo ó se sujeta con cuñas ó tornillos á un vastago vertical. Las cuchillas tienen, por lo general, una orientación común, según una recta que pasa por el eje del útil. El trépano unas veces se une sólidamente al resto de la sonda, y otras, por el contrario, es independiente, siendo cogido por aquélla para elevarle hasta cierta altura, llegado á la cual se suelta automáticamente para caer en el fondo del taladro. Esto se consigue con los cuerpos, de que más adelante hablaremos. Las barrenas son útiles que, obrando por efecto del giro, han de tener una forma muy diversa á la de los trépanos. Terminan inferiormente en una punta y no en un filo, y muy poco más arriba suelen tener una forma abarquillada, uniéndose esta parte con la punta con unas cuantas espiras cónicas; en una palabra, su forma es muy parecida y á veces igual á la del operador ó parte inferior de la sonda de Palissy. Puede, sin embargo, adoptar formas muy diversas, de las cuales son una muestra algunas de las figuras que acompañan el artículo ARTESIANO (Pozo) (véase); á excepción de la última de aquellas figuras, las seis anteriores indican otras tantas formas de barrenas, que se pueden emplear, no sólo en la construcción de un pozo artesiano, sino en un simple sondeo de investigación de terrenos para cimentar; el empleo de una ú otra forma de operador lo indicará las dificultades que se presenten, y sólo el criterio del ingeniero es el que decidirá la elección. Cuando el terreno es sumamente fluido, como acontece a veces en el lecho de algunos ríos, es mucho más ventajoso y se profundiza más rápi damente con la tercera clase de útiles, que obran á la manera de bombas, y que, además de verificar la perforación, extraen los productos del fondo, lo que no ocurre con los trépanos ni barre. nas. Constan los útiles de que estamos ocupán donos de un tubo de un diámetro igual al del taladro ó muy poco menor, cuya parte inferior está cerrada por una válvula de charnela ó de bala, siendo ésta la mejor por regla general, por que con aquéllas, enlodándose la charnela, puede ocurrir que no cierre bien, y se pierde parte del trabajo, por no llegar arriba de una vez todos los productos que hubieran sido cogidos por el útil, cegándose en parte el taladro hecho La forma de uno de estos útiles se ve en corte en la (fig. 4), en la que la parte inferior termina según un trozo de hélice con objeto de que, imprimien do su giro al útil, se facilite su penetración en el terreno. Otras veces estos útiles terminan sencillamente en un plano normal al tubo. Hemos dicho que ni con el trépano ni con la barrena podrán extraerse los productos del soudeo, y para conseguir su extracción se emplea un útil que pudiera á primera vista creerse muy ac cesorio, pero que debe, en realidad, considerarse como un operador, y es la cucharilla: es un útil de bastante importancia, puesto que sirve para extraer detritus del fondo, dando así á conocer la naturaleza del terreno atravesado, que es el objeto principal de un sondeo. Consiste la cucha ש Figs. 4, 5, y 6 rilla en una especie de barrena provista inferiormente de un apéndice casi horizontal y un poco oblicuo, que al girar el aparato en sentido conveniente recoge el material disgregado. La figura última de las referentes á útiles para perforar pozos artesianos (V. ARTESIANO) representa en corte el operador que nos ocupa. A veces para extraer los detritus pueden emplearse tambien los operadores bombas que antes hemos descrito (fig. 4). Todos ó casi todos los útiles de que nos hemos ocupado acaban por su parte superior en una va rilla terminada a su vez por un ensanchamiento, y un tornillo más delgado que sirve para unir dicho operador al resto de la sonda; otras veces se emplea el empalme de horquilla, en que una de las piezas que van á unirse termina en una horquilla formada por dos hierros planos y paralelos, y la otra por uno solamente que se adapta á una mortaja que hay en la otra pieza de los dos que se uen, y para asegurar el enlace se emplean pernos. Cabeza de sonda. - Es la parte que sirve de sostén á todo el aparato, y sobre la cual se actua para verificar el trabajo. Compónese de un estrivo de hierro, cuya parte inferior va provista de un ojo horizontal por el cual pasa una varilla t (fig. 5) ensanchada en su extremo en forma de gota de sebo, análogamente á una cabeza de ro blón, con objeto de que, pudiendo la varilla gi rar libre é independientemente del estribo, no se separe de éste. Lleva también aquélla en su otra extremidad otro ensanchamiento cilindrico, en el que va labrada una tuerca á la que puede ajustar el tornillo, en que terminan los operadores, según antes dijimos. En su parte media la varilla ves de sección cuadrada en una corta longitud e, con objeto de que en este punto se adapte la llave de maniobra. Organos intermedios entre el útil y la cabeza de sonda. - Son de dos clases: la cuerda ó las va rillas, y el escape ó tenaza de escape; aquéllas son órganos esenciales; ésta puede no necesitarse en muchos casos. Las varillas son, como su nombre indica, unas barras de hierro ó de otro material, que sirven para ir alargando la sonda según va necesitán dose. Compréndese que para una profundidad pequeña y con un útil bastante largo, uniendo éste á la cabeza de sonda, se conseguiría hacer un trabajo parecido al de la sonda de Palissy; pero como ha de profundizarse más es necesario alargar el útil, por decirlo así, y para esto se em plean las varillas. La sección suele ser cuadrada, y por cada extremo terminan en un ensanchamiento cilíndrico análogo al inferior de la cabeza de sonda al superior de los operadores; el ensanche que se coloca hacia arriba va provisto de un tornillo, y el otro lleva una tuerca; uno y otro son iguales á los de los útiles y la cabeza de sonda respectivamente, de modo que en ésta pue. de atornillarse, tan pronto un útil cualquiera como una varilla. El material de que están hechos éstos es por lo común el hierro dulce, pero éste tiene el inconveniente del mucho peso que da á la sonda cuando la profundidad es algo grande, y por esto mismo dificulta su manejo; además, si el útil va unido sólidamente á la última varilla y se opera con el trépano, los golpes de éste contra el terreno se transmiten á toda la sonda y producen en el vastago tan largo que forman, unidas las varillas, sacudidas muy violentas (á causa del mucho peso con que cae el trépano), las que pueden romper fácilmente el aparato; para evitar tales inconvenientes se ha hecho uso muchas veces de las varillas de madera, siendo la mejor la de abeto de fibra recta; pero estas varillas tienen la desventaja de que si el terreno está impregnado de agua, como ocurre muchas veces en estos trabajos, tienen tendencia á sobrenadar, y los golpes del trépano son de muy poco ó ningún efecto. A veces se han lastrado estas varillas para evitar el inconveniente, y en otras ocasiones se han empleado, con el mismo objeto, las de madera, pero ajustadas en el interior de un tubo de hierro; son las mejores estas varillas, pero resultan muy costosas. La longitud de unas y otras es variable y depende de la profundidad á que se presume llegar y de la altura que se da á la cabria que sirve de sostén á la sonda; pero sin embargo, hacer cómodo el manejo y evitar la pérdida para de tiempo en añadir con demasiada frecuencia más varillas, suelen ser éstas de 2 m. de longitud. La sección debe estar calculada de modo que el trabajo del hierro á la tracción ó compresión, y es de tener en cuenta los choques del hierro (si son de este material) ó de la madera (en el caso de emplearse la de abeto), no pase de 2 kilogramos por milímetro cuadrado en el primer caso ni de 0,7 kilogramo en el segundo, con objeto de que tengan bastante resistencia á los choques, cuya intensidad es dificil de prever. Para hacer este cálculo, si llamamos s la sección de la varilla, expresada en metros cuadrados, el peso específico del material de aquélla (ó peso del metro cúbico de dicho material), à la distancia que media entre el útil y el punto de la varilla que se considera, es evidente que el peso de varilla que hay entre estos dos puntos será rhs, y el to tal será éste, más el del útil, que llamaremos U; y ahora, como este esfuerzo que sufrirá el hierro, si de este material son las varillas, no debe pasar de 2 kilogramos por milímetro cuadrado, ó sea 2 000 000 de kilogramos por metro cuadrado, tendremos la ecuación U+hs=2 000 000 × s. De aquí podrá deducirse el valor de s; y si esta sección fuera un cuadrado de lado o sería s=2, de donde se deduciría el valor de a. Si las varillas son de madera, la ecuación sería U+ths 700 000 × 8. Entre las varillas hay una, la alargadera, que únicamente difiere de las demás en que es más corta, y se emplea sólo al empezar el sondeo. Otro de los órganos intermedios entre el útil y la cabeza de sonda es la tenaza de escape ó escape simplemente. Sólo se emplea cuando la perforación se hace con el trépano; en este caso, si la profundidad á que se ha llegado con ella, y la longitud de sonda es grande, la masa que caería en el fondo del taladro á cada golpe de trépano sería la de toda la sonda en el caso de estar invariablemente unido aquél á la última varilla; la fuerza viva sería enorme, y se produciría muy pronto la rotura de la sonda, según antes indicamos. Para evitar esto hase recurrido á los escapes, que son unos mecanismos intermedios entre la última varilla y el trépano; con ellos se consigue, como dijimos anteriormente, que aquél caiga desde cierta altura independiente del centro de la sonda, y su choque contra el fondo del taladro no se transmita á todo el aparato. Hay muchas clases de escapes para este objeto, pero sólo indicaremos dos tipos: el de Kinel, y el de Laurent y Dégousée. El primero es muy sencillo, y consiste en una tenaza cuyas mandibulas cogen la extremidad superior del tré pano, mientras que los brazos largos de dichas tenazas están colgados del resto de la sonda; y como por el peso del útil aquellos brazos, y por tanto las mandíbulas, tienden á aproximarse, claro es que cuando se eleve la sonda subirá sujeto á ella el trépano; pero al iniciarse el descenso, si el cambio de movimiento es algo brusco, se aflojarán las tenazas y caerá el trépano al fondo del taladro, hasta tanto que, continuando el descenso, vuelva a ser cogido el operador por las tenazas de escape. El escape de Laurent y Dégousée, es un poco más complicado, pero su funcionamiento es más regular, y el cambio del movimiento de ascenso con el de descenso puede hacerse con toda suavidad y sin exponer la sonda al menor choque. Compónese de una tenaza cuyos brazos d, e (fig. 6) están articulados en los puntos g, h, respectivamente, á dos placas p, una por cada lado, de modo que entre ambos queda alojada la tenaza. Los brazos superiores y más largos de ésta tienen tendencia á separarse por la acción del muelle de forma de corazón v, cuyos puntos de apoyo contra la tenaza están algo más altos que los ejes de giro g, h de éstas. Además los brazos más largos de di cha tenaza entran en las muescas de dos piezas articuladas a, h, de forma especial, cuyo eje común de giro, c, está unido á las dos placas p. Cada una de las referidas piezas a y b tiene un brazo saliente s, que puede correr á lo largo de una muesca h, h practicada en la pared de una campana C, que envuelve todo el aparato y que es independiente de él. Las dos placas p, que son solidarias entre sí, y esto sucede en su parte superior por la pieza v, van colgadas de un vástago v, que después de atravesar á rozamiento suave la campana C termina con un empalme y un tornillo, con el que se une solidariamente á la última varilla de la sonda; como las dos piezas a, b corren á lo largo de sus correspondientes ranuras hh, h'h', es evidente que las placas py todo el mecanismo unido á ellas podrá moverse de arriba á abajo todo cuanto permitan las ranuras; pero éstas llevan unos topes t, contra los cuales, al tropezar las piezas a y b, harán aproximarse los brazos superiores de la tenaza d, e, y por tanto se separarán las mandíbulas ó parte inferior de estos mismos brazos, soltando el vástago t' del trépano sujeto entre ellas. Para que las referidas mandíbulas puedan coger á aquél, lleva unas muescas en las que pueden encajar las mandíbulas, y además va guiado el trépano por dos salientes f,j unidas á él y que entran en las ranuras impidiendo el cabeceo de la varilla t'. Las ranuras h van cerradas inferiormente, de modo que al elevarse la campana C no podrán salirse de aquéllas los salientes del vástago t'. Compréndese, según esto, el modo de funcionar este mecanismo: una vez cogido por las mandíbulas d, e' el trépano, al elevarse v, y por tanto las placas p y todo el mecanismo, será arrastrado hacia arriba el trepano, que no podrá soltarse de las garras d', e', por la acción del muelle vá cerrar la tenaza, cuya tendencia está aumentada por la de otros muelles en espiral, 7, k, que actúan en las piezas a, b; el movimiento ascendente del conjunto continuará hasta tanto que las salientes s tropiecen con los topest, t, en cuyo caso, siguiendo la elevación del escape, se abrirán las tenezas y soltarán al vástago t', que caerá al fondo; la disminución brusca en el peso de la sonda hará conocer á los operarios que desde arriba la manejan el instante en que se ha soltado el trépano, y entonces harán descender el aparato todo lo posible, en cuyo instante no podrá bajar más, por haber sido cogido el trépano por las tenazas, y entonces volverá á repetirse la operación en la misma forma. extremos en dos largos mangos h, h, en los que actúan los operarios al verificarse el sondeo. La pieza en S es de hierro y tiene la forma que indica su nombre; es, pues, un gancho doble que sostiene en uno de sus lados el estribo de la cabeza de sonda, y en que el otro lado se cuelga de la cuerda que, pasando por una polea situada en la cabria accesoria en todos estos trabajos (V. SONDEO), sostiene la sonda y sirve para darle los movimientos de ascenso y descenso. Gene. ralmente los brazos de la S que forma la pieza que nos ocupa se unen con una chapilla de hierro que va de uno á otro de estos brazos y se sujeta á ellos con llaves análogas á la ll de la fig. 7. pueda salirse de la pieza en S el estribo de la El objeto de esta chapa de enlace es evitar que cabeza de sonda, ó la cuerda que sostiene á esta última. La llave de retención es una ancha placa de hierro (fig. 8), que lleva una larga muesca del ancho de la parte delgada de las varillas, y sirve para retener la más alta de éstas por un ensanchamiento inferior cuando es preciso añadir otra nueva varilla. Va además provista de un mango a, a, y un saliente b, b para apalancar si preciso fuera cuando se usa la llave por debajo del ensanchamiento de la varilla que sostiene. El pie de cabra es un útil que se emplea cuando se saca la sonda, y cuyo objeto es dar rapidez á la operación: consiste en un estribo análogo al de las cabezas de sonda, y que sostiene una barra de hierro ligeramente encorvada dos veces, que luego se dobla en sentido horizontal y se bifurca, formando una horquilla entre cuyos brazos se coloca la parte delgada de una varilla, y que no pudiendo pasar por entre los mismos el ensanchamiento es elevada la varilla y con ella toda la sonda, sin necesidad para esto de atornillar aquélla á la cabeza de sonda, como ocurriría si se emplease ésta; el pie de cabra sustituye, pucs, á la cabeza de sonda en la extracción de esta última; pero como se ve, no es un accesorio indispensable, y sí sólo muy conveniente, porque abrevia el trabajo. Los manguitos guías sirven, como su nombre indica, para dirigir la sonda en su dirección verAccesorios. - Comprenderemos bajo este nom- tical; se colocan de trecho en trecho, por ejemplo bre, no sólo los que sin ser de primera impor- uno en cada varilla, fijándose en ésta antes de tancia, como los órganos anteriormente descritos, hacerla descender; permiten estas piezas el deslisirven de medios auxiliares en el manejo de la zamiento en su interior de la varilla corresponsonda, sino aquellos que se emplean en caso de diente en su parte delgada, y como su forma extehaberse roto ésta. Entre los primeros tenemos rior se adapta á la circular del taladro, siendo la llave de maniobra, la pieza en S para sostener de diámetro un poco menor que éste es evidente la sonda, la llave de retención, el pic de cabra, que impedirán casi por completo el cabeceo de los manguitos guías y el destornillador. La llave la sonda, y aun cuando sea ésta muy larga, si hay de maniobra (fig. 7) es la que sirve para coger varios de estos manguitos, se conseguirá dicho la sonda y poderla manejar, y está formada por efecto, lo que evitará ó disminuirá considerableuna pieza de hierro con una muesca en el medio mente la desviación del taladro. Para ensartar en la que encaja el cuadradillo e (fig. 5) de la estos manguitos en las varillas pueden emplearcabeza de sonda; una aldabilla a ó pasador sirve se varios medios, ya obligando á que aquellos se para cerrar el lado r abierto de la muesca, una cierren de un modo análogo á la llave de maniovez dentro de ella el cuadradillo de la cabeza de bra, haciendo aquí el papel de aldabilla un secsonda; dicha aldabilla gira alrededor de una char-tor cilíndrico del manguito, ó adoptando cual |