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diolites, á la creta media y superior de las formaciones de Europa y América.

SINOFTALMO (del gr. σúv con, y baλuós, ojo): m. Zool. Género de insectos del orden de los coleópteros, familia de los curculionidos, tribu de los ambatinos. Este género se distingue ofrecer los caracteres siguientes: rostro alarpor gado, arqueado, muy robusto, delgado y filiforme en el resto de su longitud; sus escrobas comienzan al nivel de la parte basilar; las antenas medianas; el escapo en maza y no llega más que hasta los ojos; el funículo con el primero y el segundo artejos casi cónicos, un poco alargados; los siguientes muy cortos, muy apretados y engrosando gradualmente; la maza más larga que el funículo, cilíndrica y finamente vellosa; los ojos, muy grandes, ocupan la mayor parte de la cabeza y contiguos sobre la frente; el protórax mucho más largo que ancho, regularmente cónico, truncado delante por y en su base; ésta provista de un pequeño lóbulo triangular; el escudo indistinto, los élitros alargados, casi cilíndricos, sinuados lateralmente en su parte media y estre. chados en su tercio posterior; las patas muy largas y poco robustas; los fémures algo pedunculados en su base en maza y fuertemente dentados por debajo; las tibias comprimidas, un poco arqueadas y brevemente unguiculadas en su extremidad; los tarsos largos, con el primero y segundo artejos delgados, el tercero corto y el cuarto muy grande; el segundo segmento abdominal es más grande que el tercero y cuarto reunidos; metatórax alargado; el cuerpo escamoso por debajo y densamente pubescente por encima de su cuerpo.

El tipo de este género es el Sinophthalmus cruciferus Schh., originario de Manila, de color blanco y revestido por encima de multitud de pelos amarillentos, que dejan al descubierto sobre los élitros dos bandas desnudas completamente, formando una especie de cruz.

SINOICO (del gr. ovvoikéw, yo habito con): m. Zool. Género de tunicados de la clase de las aseidias, orden de las sinascidias, que se caracterizan por tener comúnmente el cuerpo pedicula do, seinicartilaginoso, formado de un solo sistema y que se eleva en un cilindro sólido, vertical, aislado ó asociado por su pedículo a otros cilindros semejantes.

Los animales son paralelos y están dispuestos en una sola línea circular; el orificio branquial está hendido en seis desiguales, de los cuales los tres más grandes concurren á formar el borde exterior de una estrella cóncava situada en el centro ó en el vértice del sistema; el tórax es oblongo, y las mallas del tejido respiratorio es. tan desprovistas de papilas; el abdomen es inferior, sesil, del tamaño del tórax; el ovario único, sesil, adherido al fondo del abdomen y perpendicular hacia abajo.

La especie más estudiada y que caracteriza el género es el Synoicum simplex, que vive principalmente sobre los fucos del Océano Atlántico y en las aguas de Nueva Holanda.

SINOLO: m. Zool. Género de insectos del orden de los coleópteros, familia de los cerambícidos, tribu de los espondilinos. Este género de insectos se reconoce por ofrecer los caracteres siguientes: palpos maxilares un poco más largos que los labiales, el último artejo de todos fusiforme; cabeza poco saliente, ligeramente cóncava en las antenas; frente vertical, transversal; antenas delgadas, notablemente más largas que el cuerpo, con los artejos desiguales en longitud; ojos muy escotados; protórax muy alargado, ligeramente tuberculado sobre los lados, provisto de callosidades discoidales; escudo variable; los élitros recubren la base del abdomen, ligeramente dehiscentes por detrás y redondeados en su extremidad, los posteriores tan largos como el abdomen; tarsos delgados, los posteriores con el primer artejo por lo menos tan largo como el segundo y tercero reunidos; el último segmento del abdomen estrechado y truncado por detrás; episternones metatorácicos muy anchos, débil mente estrechados hacia atrás; cuerpo largo, deprimido, de tegumentos poco sólidos, en parte pubescente.

El tipo de este género es el Sinolus umbellatarum, de pequeño tamaño; el color de sus tegumentos es generalmente leonado; sus élitros están adornados de una pequeña mancha blanquecina.

SINÓLOGO (del gr. Ziva, la China, y Xoyos, doctrina): m. El que cultiva la lengua y la literatura de la China.

SINONICA (del gr. σύν, con, y όνυξ, ονυχος, uña): f. Zool. Género de insectos del orden de los coleópteros, familia de los coccinélidos, tribu de los coccinelinos. Este género se distingue por presentar los caracteres siguientes: cabeza encajada en el protórax hasta la mitad de los ojos; el borde casi escotado; los ojos ovalados, muy convexos y con un surco en el borde interno; las antenas delgadas, tan largas como la frente, con el primer artejo semicircular, ensanchado en su borde anterior; los artejos siguientes cónicos, transversales, y el último ligeramente comprimido; el pronoto transversal, poco convexo, mucho más estrecho que los élitros, con el borde anterior escotado y sinuado en cada lado, los bordes laterales convexos y un poco convergentes por delante, el borde posterior convexo y regular; el escudo triangular, un poco más ancho que largo; los élitros grandes, algo redondeados, convexos, muy ensanchados sobre los bordes, que son declives; las epipleuras, muy anchas, miden en su mayor anchura casi la mitad de la del metasternón, son cóncavas y presentan ligeras impresiones para alojar los dos pares de patas posteriores; el prosternón recto, estrecho, con dos surcos paralelos, algo redondeados en la base, y ofreciendo debajo de los ángulos anteriores una foseta ancha; el mesosternón escotado hasta la mitad de su longitud; el abdomen con cinco segmentos; las placas abdominales en forma de arco; las patas cortas; la extremidad de los fémures llegan únicamente hasta la mitad de la longitud de las epipleuras.

rezcan? Puede la sinonimia convertirse en igualdad? No; no hay sinónimos perfectos, según suelen llamarse. En los primeros tiempos de la formación de la lengua, derivada de diversos orígenes, podrá haber dos ó más palabras que desiguen un mismo objeto, una misma idea; pero muy luego cesa semejante irregularidad, verificándose una de las dos cosas siguientes: ó desaparece, quedando sin uso una de las palabras dobles, ó sigue usándose, pero representando alguna idea accesoria, alguna modificación que la convierte en palabra distinta. Así es que en ningún idioma ya formado y medianamente cultivado se encuentran dos voces que signifiquen propiamente y de modo preciso y exacto lo mismo. «Si hubiese sinónimos perfectos (dice á este propósito Dumorsais), habría dos lenguas dentro de una misma lengua; cuando se tiene el signo exacto de una cosa, no se busca otro. >>

Los sinónimos se dividen en dos clases: 1.a Homo-radicales, iso-radicales ó coderivados, esto es, derivados de una misma raíz ó pertenecrédito y creencia, fortaleza y fuerza, honor y cientes á una misma familia etimológica, como honra. 2. Los hétero-radicales, esto es, de diferente raíz y no pertenecientes á una misma familia etimológica, como dicha y fortuna, dicción, palabra, término y vocablo. Para determinar la diferencia entre los sinónimos homo-radicales es absolutamente indispensable la etimología, pues todas sus diferencias dependen, por regla general, del diferente valor significativo de las desinencias y de los pretijos. Para la determinación de la diferencia entre los sinónimos hétero-radicales también es muy útil la etimología, pero se requiere además el detenido examen histórico-filosófico de cada voz, con arreglo á un sistema rigurosamente lógico. Así, pues, las diferencias entre los sinónimos proceden: 1.° De la diversidad de las desinencias. 2.° De la diversidad de los prefijos. 3.° De la diversidad de los orígenes de las voces. 4.° De la diversidad de su formación. 5.° De las vicisitudes que exóperimentan las lenguas y del uso. Es imposible escribir con propiedad, precisión y exactitud, sin conocer muy á fondo el valor etimológico y usual de las voces sinónimas.

Este género no contiene más que una especie muy notable por su gran tamaño y su coloración. Su área de distribución es muy extensa, pues se la conoce de la China, del Japón, Java, Borneo é islas Filipinas.

SINONIMIA (del lat. synonymia; del gr. ovvwvuuía): f. Circunstancia de ser sinónimos dos

más vocablos.

SINONIMIA: Ret. Figura que se comete empleando adrede voces sinónimas ó de significa ción semejante para amplificar ó esforzar la expresión de un concepto.

Esta figura se llama SINONIMIA y es muy común en los discursos. JOVELLANOS.

SINÓNIMO, MA (del gr. ovvúvvuμos; de σvv, con, y dvoua, nombre): adj. Dícese de los vocablos ó palabras que tienen una misma ó muy parecida significación. U. t. c. s. m.

...

no son SINÓNIMAS esas voces (riesgo y pe ligro): etc. LARRA.

Entren luego en la rebaja,
Cuando en la tribuna arguye,
Las frases que no concluye,
LOS SINÓNIMOs que encaja...;

BRETON DE LOS HERREROS.

- SINÓNIMO: Gram. Llámanse sinónimas las voces que son expresivas de una misma idea fundamental, pero commotada por cada una de aquéllas en una modificación ó relación diferente. Por ejemplo, nombrar y llamar son voces sinónimas ó compañeras, porque ambas significan la idea de articular una voz ó de pronunciar un nombre, diferenciándose en que el nombrar es para distinguir en la oración la conversación ó discurso, y el llamar es para hacer que uno venga ó se acerque al que pronuncia el nombre. Así decimos: el Señor llamó á todos los animales, y los nombró delante de Adán. No siempre se deben nombrar las cosas por sus nombres, ni llamar en auxilio á cierta clase de gentes.

Los nombres individuales ó propios no pueden ser sinónimos; únicamente pueden serlo los genéricos ó apelativos, los adjetivos y los verbos. Para que dos voces sean sinónimas se requieren dos condiciones: 1. Asemejarse por una idea genérica común. 2. Diferenciarse por la connotación de ideas particulares ó accesorias, tan poco distantes de la idea genérica, ó tan poco distantes entre sí, que sólo puedan distinguirse por medio de un análisis muy fino y delicado. Dos ó más voces son siempre tanto más sinónimas cuanto menores son las diferencias de sig nificado que las separa. ¿Pueden estas diferencias llegar á ser tan mínimas que al fin desapa

Roque Barcia, que con tal claridad expone lo referente á los sinónimos, hace atinadas consideraciones acerca del importante ministerio reservado á la sinonimia. Esta razona la palabra, explica el uso, determina y enriquece la lengua. Da sentido, fijeza y caudal. En efecto, si con ayuda de su estudio logramos distinguir en castellano cincuenta mil voces que se confundían como sinónimas, claro es que estas voces deben considerarse como añadidas al diccionario, puesto que nos ofrecen otros tantos medios distintos de expresión. Es cierto que esta riqueza improvisada, este caudal lógico, no aprovechará en el momento á todo el mundo; pero el paso está dado, el germen queda, y para coger frutos no es tarea despreciable sembrar hoy la semilla. Pero no es el aumento de signos lo que más aboga por el estudio que recomendamos. Su principal ventaja consiste en que convierte el idioma en un sistema, sistema que da luz para discutir, que nos da reglas para conocer las bellezas ó las fealdades en que el lenguaje puede abundar, del mismo modo que las lagunas que puede tener. ¿Quién sabe lo que sobra ni lo que falta en un conjunto no definido, en una serie no analizada? ¿Quién no vacila, quién no duda, cuando se ve acosado por una ignorancia invencible? Esto es tan sencillo como preguntar: ¿quién sabe una cosa que no sabe? De aquí el azar funesto que está pesando sobre nuestra lengua, un azar que la hace gemir y agobiarse á cada hora del día. De aquí esa especie de fuero despótico con que todo el mundo se cree autorizado para traernos una nueva definición, un giro nuevo, una nueva palabra, como quien coge una fruta en un cercado que no tiene ni un triste guardián Estudiemos esa nueva definición, y tal vez mata el sentido lógico; estudiemos ese nuevo giro, y quizás es contrario á nuestra armoniosa Sintaxis; estudienos la nueva palabra, y acaso es repug nante á la melodía de nuestro idioma, esa mielodía que tanto hay que mirar en una lengua, planta venida de las dos grandes florestas del mundo: Grecia y Roma.

La sinonimia es la ciencia del idioma, la filosofía del uso, una filosofía que podrá estar en todos los entendimientos, pero que no tiene una fórmula clara en ningún libro. La demostración

puesta en lugar de la duda; la regla puesta en lugar del acaso; lo distinto puesto en lugar de lo confuso: eso es lo que debe hacer la sinonimia. Dentro de una palabra va una idea, dentro de un sonido va una lógica, así como dentro de un vestido va la criatura vestida. Esa lógica y ese sonido, esa idea y esa palabra, esos eternos y universales compañeros del mundo, no se han entendido todavía en nuestro país. Si conviene que se entiendan en adelante, la sinonimia es un gran estudio. Si no conviene, la sinonimia debe relegarse al olvido.

SINÓNOMO, MA: adj. SINÓNIMO. U. t. c. s. SINOO: m. Bot. Género de plantas (Synoum) perteneciente á la familia de las Meliáceas, cuyas especies habitan en las regiones subtropicales de Nueva Holanda, y son plantas arbóreas, con las hojas alternas, imparipinnadas, con cinco á siete pares de folíolas elípticolanceoladas, casi enteras, pelosas en las axilas de los nervios por el envés y con las flores dispuestas en racimos axilares paucifloros; cáliz cuadripartido, con las lacinias empizarradas en la estivación; corola de cuatro pétalos hipoginos, arrollados en la estivación y patentes en la antesis; tubo estaminal cupuliforme, casi entero, con la garganta anterifera en su superficie interna y ocho anteras casi totalmente incluídas, erguidas, aovadas; ovario inserto sobre un disco y dividido en tres celdas, con los óvulos geminados, adheridos á uno y otro lado de una laminita colgante, por lo que parecen solitarios; estilo corto y carnoso y estigma discoideo; el fruto es una cápsula trilocular que se abre por dehiscencia loculicida en tres valvas, las cuales llevan los tabiques en sus líneas medias, semillas geminadas en las celdas, sosteni das por una laminita carnosa que nace del ápice del ángulo central y á veces envueltas por ella; embrión sin albumen, con los cotiledones carnosos y la raicilla muy corta y súpera.

SINOPE Geog. C. cap de dist., prov. de Kastamuni, Anatolia, Turquía asiática, sit. en la costa del Mar Negro y en el istmo que une á tierra firme el alto promontorio terminado en el Boztepe Burun; 9000 habits. Su puerto es el más seguro de la costa meridional del Mar Negro;

A

Moneda de Sinope

destruyó parte de la c. No hay ya vestigios de la
c. griega ni del palacio de Mitridates; se ven, sí,
fragmentos de esculturas é inscripciones en las
murallas bizantinas.

Cuadro SINÓPICO; tabla SINÓPTICA.

Diccionario de la Academia.

- SINÓPTICO: m. Zool. Género de insectos del orden de los coleópteros, familia tenebriónidos,

SINOPENSE: adj. Natural de Sinope, ciudad tribu de los megacantinos. Este género se disde Asia antigua. U t. c. s.

- SINOPENSE: SINÓPICO.

SINÓPICO, CA (del lat. sinopicus): adj. Perteneciente á Sinope.

SINOPITA: f. Min. Especie de arcilla ferrugi nosa incluída por todos los autores en el grupo de las caracterizadas por contener óxido de hierro en abundancia, cuyo cuerpo sirve en ellas á guisa de substancia colorante, ó es, pues, un silicato hidratado de alúmina, ó mejor acaso puede considerarse á modo de alteración de un silicato alumínico llevada á cabo gracias á la mez

tingue por ofrecer los caracteres siguientes: menton en forma de un cuadrado transversal y convexo sobre su línea media; el último artejo de los palpos maxilares muy transversal; el labro corto y cortado rectamente por delante; la cabeza corta y convexa sobre el vértice; el epistoma des, en forma de una herradura, algo contiguos corto y truncado por delante; los ojos muy gran

por encima y ocupando próximamente la mitad de la cabeza; las antenas, de la longitud de los dos tercios del cuerpo, delgadas, filiformes, con los últimos artejos grandes y ovalados; el protórax transversal, rectilíneo por detrás, apenas escotado por delante, con sus ángulos anteriores redondeados, truncado y con tres ligeros senos en su porción posterior; el escudo en forma de un triángulo rectilíneo; los élitros más anchos que el protórax en su base, oblongo-ovalados y muy convexos; las patas medianas; fémures muy robustos y un poco arqueados, los anteriores más gruesos que los otros y provistos por debajo de un diente pequeño apenas distinto; tibias lineales; el primer artejo de los tarsos posteriores muy alargado; el último de los anteriores estrechamente largo; el mesosternón en forma de un triángulo muy largo, declive y cóncavo por delante; el prosternón encorvado por detrás; el cuerpo oblongo-ovalado y pubescente.

El tipo de este género es el Synopticus degener Thoms., originario del Gabón, de color pardo ferruginoso y enteramente revestido de una pubescencia rosácea; sus élitros presentan estrías ocupadas por muchos puntos muy aproximados y bien marcados.

cla de diversas substancias que lo impurifican.
Como todos los minerales comprendidos en el
grupo de las arcillas, preséntase constituyendo
masas compactas dotadas de marcadísima frac-
tura terrosa; adhiérese con bastante intensidad á
la lengua; posee el color rojo propio de las arci-
llas ferruginosas, pero no muy unido y unifor-
me, sino con manchas blanquecinas más ó menos
redondeadas; su peso específico hállase compren.
dido entre los números 1,6 y 2. Por la acción
del agua no forma la sinopita una pasta dotada
por lo común de cierta plasticidad tratándose
de la mayoría de las arcillas, antes en contacto
de aquel líquido, lejos de mezclarse con él, diví-
dese en fragmentos de bastante tamaño y puede
observarse cómo, aun pasado mucho tiempo, no
se pulveriza en manera alguna. Es cuerpo fusi-
ble cuando se expone á muy continuada acción
del fuego del soplete, y en tal caso produce un
esmalte caracterizado mediante su color amarillo
ó pardo; y si también por vía seca empléase como
reactivo el nitrato de cobalto, pronto el intenso SINOQUIPE: Geog. Municip del dist. de Ariz.
color azul del esmalte así obtenido denuncia la pc, est. de Sonora, Méjico; 390 habits., distri-
presencia de la alúmina; calcinada la sinopita, y buídos en el pueblo de Sinoquipe, comisarías de
tratada luego por ácido sulfúrico, es atacada sin San Luis y San Agustín, hacienda de Tetuachi
grandes dificultades, y prepárase de tal suerte el y ranchos de San Cristóbal y Santa María.
sulfato alumínico, que tiene en la industria,
particularmente en la Tintorería, muchas apli-
caciones. Hállase la arcilla descrita, como todas
las del grupo, constituyendo nódulos de ciertas
dimensiones en basaltos wackes y amigdaloides,
y encuéntrase sobre todo en el Asia Menor, ha-
biendo sido conocida desde antigüedad muy re-
mota y utilizada en la Pintura allá en los prin-
cipios de este arte. Trátase, por junto, de una
variedad de bol, la cual agrúpase con otras mu.
chas arcillas ferruginosas, algunas de ellas tan
ricas de óxido de hierro que suelen considerarse
variedades de bimanita; las principales de estas
arcillas son los minerales denominados cimolita,
amanita, rabournoffskina, smelita, stolpmita,
maltacita, steargilita, jabón de montaña, harina
fósil, cropión, ochran, milosquina, pelicanita,
achlaragdita, sfragita, catlinita, sconlerita, eri-

ta, para no citar sino los que mejor distinguense
unos de otros á virtud de señalados caracteres,
perfectamente determinables dentro del grupo
de las arcillas rojas y obscuras, siempre muy car-
gadas de óxido férrico, á cuyo cuerpo deben mu-
chas de ellas sus aplicaciones en la Pintura, las
cuales son parte principal para haberse formado
la industria de los vasos artificiales, cuya base
y primera materia viene á ser el sulfato ferroso
caparrosa verde, capaz de experimentar cierto
género de alteraciones más o menos profundas,
que dan por resultado compuestos de hierro en
diferentes estados de oxidación, y son los mati-
ces y colores propios de la sinopita desde las
arcillas sus congéneres que quedan enumeradas.

hasta época reciente la falta de vías de comuni-
cación con el interior impidió su desarrollo, de
suerte que sólo era frecuentado por barcos rusos
que iban á llevar provisiones para la c.; pero de
1882 á 1885 se han construído hacia el interior
varias carreteras, que han de favorecer el desarro-
llo de este puerto. La c. se divide en dos partes:
la c. turca ó Kaleh, rodeada de murallas y torres,
y la c. griega. Hay arsenal y astillero Es poblanita, seudoestratita, teratolita, plintita y rodali
ción muy antigua, y figuró entre las principales
c. de la Paflagonia. Según la tradición, la fundó
uno de los compañeros de Jasón; la Historia atri-
buye su origen á los milesios, que enviaron dos
colonias, una en 751 a. de J. C. y otra después
de la destrucción de la c. por los cimerios en
632. Pericles, después de haberla libertado de su
tirano Timesileón, condujo á ella 600 atenienses.
Por su posición en un istmo tenía doble puerto,
y su marina le aseguró el imperio del mar, al O.
hasta el Bósforo de Tracia, al E. hasta el Halis.
Los principales artículos de su comercio eran el
cinabrio llamado tierra de Sinope, y el pescado
que se conservaba en magníficos depósitos. Ata-
ca la en vano por Mitridates V, rey del Ponto, y
socorrida por los rodios, fué tomada por Farna-
baces I; y bajo Mitridates el Grande, que en ella
había nacido, vino á ser la cap. del reino del
Ponto. Tomada por Lúculo en 71, fué declarada
libre y autónoma; César, en 45, envió una colonia
romana y tomó la c. el nombre de Colonia Julia
Cesarea Félix Sinope. Aunque conservó bajo el
Imperio su importancia comercial y sus riquezas,
no fué ya, sino Amasca, la cap. de la prov. de la
Paflagonia. En ella nacieron el filósofo Diógenes
el Cinico y el poeta cómico Dífilo. Tomada á los
griegos por los turcos selyúcidas, formó parte del
pricipado de Kastamuni bajo la soberanía de los
otomanos, hasta la segunda mitad del siglo XV.
Hoy es llamada por los turcos Sinub. El almi-
rante ruso Najimof, en 30 de noviembre de 1853,

Asia oriental, cuyas primeras noticias se hallan SINOS 6 SINES: m. pl. Geog. ant. Pueblo del en Ptolemeo. Hallábase limitado al N. por la Serica, al E. y S. por tierras desconocidas, al O. por la India más allá del Ganges y la parte del Océano Indico llamado Gran Golfo. Su país corresde la China, si bien hay quien circunscribe su teponde aproximadamente á la Indo-China y parte rritorio á la parte O de la Indo-China. Para unos los sines son los tsin ó chin de los semitas, que han dado nombre á China; para otros el nombre de los sines y el de Thinæ, su cap., recuerda el de Tsiam, hoy reino de Siam. Ptolemeo habla también de un río Seno que baja del N., forma ángulo hacia el S. y sube luego hacia el N. para desembocar en el mar, después de haber recibido al S. el Cotiaris que baña á Thinæ. Encuéntrase, en efecto, en la costa O. la c. de Tena-Serim, sit. á orillas de un río del mismo nombre, cuyo curso tiene dirección igual

á la del Senus.

SINOTO (del gr. oùv, con, y oûs, úrós, oreja): m. Zool. Género de mamíferos del orden de los quirópteros, familia de los vespertilionidos, que se caracterizan por tener la cola incluída en la membrana interfemoral; dedo medio con dos falanges; primera falange del dedo medio en línea recta, durante el reposo, con el hueso metacarpico; narices abriéndose en la extremidad del hocico por orificios simplemente elevados ó circulares y no circundadas por distintos apéndices cutáneos foliáceos; el borde externo de la concha de la oreja extendido por delante sobre la boca y antes de los ojos; huesos intermaxilares pequeños, laterales, separados por delante por un ancho espacio; trago distinto; molares bien desarroSINOPSIS (del gr. ovvwfis; de ouv, con, y llados, con pliegues en forma de W en la corona. õis, vista): f. Compendio ó suma.

SINOPLE (del fr. sinople): adj. Blas. SINOBLE.
U. t. c. s.

(señalará el regente) las propiedades convenientes á cada una (de las historias), á saber: á las historias generales, particulares y sus especies, y á los compendios, SINOPSIS, diarios, etc.

JOVELLANOS.

SINOPTICO, CA (del gr. σuvoπtikós): adj. Dícese de lo que a primera vista presenta con claridad y distinción las partes principales de un todo.

La especie tipo de este género es el Synotus barbastellus Schreb. V. BARBASTELA..

SINOTOMA: f. Bot. Género de plantas (Synotoma) perteneciente á la familia de las Campanuláceas, cuyas especies habitan en la porción media de Asia, y son plantas herbáceas, perennes, con las hojas alternas, las radicales pecioladas y mayores y las caulinares generalmente sentadas; flores sentadas ó muy cortamente pedice ladas, reunidas formando espigas ó cabezuclas; cáliz con el tubo ovoideo ó cónico-invertido, soldado con el ovario, y el limbo súpero, quinquéfi

corva; en uno de esos puntos se desarrolla fluc-
tuación evidente, la piel se pone roja, se adelgaza
de dentro afuera y por último se perfora, salien-
do un pus tenue, mezclado con copos de fibrina,
de consistencia cascosa. Después de este acciden
te disminuyen los dolores y el estado general
comienza á mejorar, pero esa mejoría es falsa y
pasajera, porque bien pronto se manifiestan otro
ú otros abscesos.

do; corola inserta en la parte superior del tubo ca-
licinal, quinquepartida, con las lacinias lineales,
conniventes en el ápice formando un tubo por
donde atraviesa el estilo; cinco estambres inser-
tos con la corola, con los filamentos ensanchados
en la base las anteras largas y libres; ovario
ínfero con dos ó tres celdas, en cuyos ángulos
centrales existen placentas multiovuladas, con
los óvulos anátropos; estilo filiforme, peloso en
el ápice y con dos ó tres estigmas lineales cor- Así continúan las cosas por espacio de dos á
tos; el fruto es una cápsula ovoidea, con dos ó tres años, durante los cuales el estado general
tres celdas, cuyas valvas se abren por medio de ha padecido ya mucho; el niño, antes sano y
grietas longitudinales situadas en sus paredes robusto, se pone pálido y enfermizo; la perfora
hacia la mitad de su altura; semillas numerosas, ción de los tejidos por el pus va acompañada ó
ovoideas ó casi comprimidas, alguna vez brillan-seguida en ciertos casos de fiebre; á cada nuevo
tes; embrión ortótropo en el eje de un albumen absceso esta fiebre es mayor, y así se va aniqui-
carnoso, con los cotiledones muy cortos, diver- lando el enfermo, que pierde el apetito, las di-
gentes, y la raicilla centripeta y próxima al om. gestiones son difíciles y el enflaquecimiento au-
bligo.
menta de día en día El mal puede entonces re-
troceder espontáneamente, lo cual es raro, ó con-
tinuar su evolución y producir la muerte por el
aniquilamiento que resulta de la fuerte supura-
ción y de la fiebre héctica continua. Cuando el
enfermo debe curar disminuye poco a poco la
secreción del pus, mejora el estado general re-
aparece el apetito, etc; por último se cierran
las fístulas; todavía la articulación puede formar
un ángulo ó presentar cualquiera otra deformi-
dad pero ya no duele y el enfermo se da por
satisfecho con tener una pierna rígida Esta ter-
minación de la supuración articular crónica por
anquilosis es quizá la más favorable cuando la
afección es grave; por lo demás, la anquilosis
puede ser completa ó incompleta, es decir, que
la articulación queda absolutamente inmóvil
conserva aún cierta movilidad.

SINOVAS Geog Barrio del ayunt y p. j. de Aranda de Duero, prov de Burgos; 169 habits. SINOVIA: f. Anat. y Fisiol Humoi segregado por las membranas sinoviales. Constituye un líquido claro muy viscoso, que forma hebra, más denso que las serosidades, incoloro, á veces amarillo ó citrino y de reacción ligeramente alcalina. Tiene en suspensión algunos leucocitos y células epiteliales pálidas, de pequeñas dimensiones é irregulares, procedentes de la membrana sinovial que le segrega, además sales minerales, umenia y albúmina. Sólo difiere del moco por la presencia de este último elemento, y su viscosidad es debida á una materia albuminoidea particular, á la cual dió Robin el nombre de sinovina.

Según Robin, la composición de la sinovia es el siguiente. Principios de la primera clase: agua, 928; cloruro de sodio y carbonato de sosa, 6 fosfato de cal, 1,50; fosfato amónicomagnesiano, indicios. Principios de la segunda clase: Principios de origen orgánico, no dosificados; cuerpos grasos, 0,60; sinovina (albúmina) 64, fibrina (en las artritis (algunos copos).

con

La sinovia humedece las articulaciones y tribuye facilitar la movilidad de las mismas. SINOVIAL adj. Anat. y Fisiol Dícese de las glándulas que secretan la sinovia y de lo concerniente á ella

SINOVITIS (de sinovia y el sufijo itis, inflamación): f. Patol Inflamación de las membranas sinoviales. Esta enfermedad, que se manifiesta principalmente en la articulación de la rodilla, y que no es rara en la cadera, tiene un principio generalmente lento, rara vez subagudo. El vulgo le designa con el nombre de tumor blanco, y algunos autores la llaman artritis crónica ó artritis escrofulosa. Cuando padece, por ejemplo, la articulación de la rodilla, los padres suelen observar que el niño arrastra la pierna ó que cojea algo de esc lado; el enfermo aqueja, bien espon táneamente bien cuando se le pregunta, un ligero dolor, sobre todo después de una marcha prolongada ó cuando se comprime la articulación. Las personas ajenas á la ciencia no suelen observar nada de anormal; pero el médico, comparando ambas rodillas, observará bien pronto que los surcos que existen en estado normal á los lados de la rótula cuando el miembro se halla en extensión, y que tanto contribuyen á la armonía de las formas de esa región, han desaparecido en la rodilla que comienza á estar enferma, ó que son mucho más superficiales que en el lado sano; esto es lo único que puede observarse al principio.

La dificultad para la marcha es tan insignificante que los niños caminan semanas y meses enteros cojeando apenas y se quejan muy poco; generalmente sólo se llama al médico cuando la pierna comienza á hincharse y á doler después de hacer algún ejercicio El tumor, poco aparente al principio, se reconoce entonces con facilidad; la rodilla aparece uniformemente redondeada y muy sensible á la presión. Si el arte no interviene en este período y la afección sigue su curso regu lar, ocurre lo siguiente: el enfermo podrá andar algunos meses con más o menos dificultad, pero al cabo de algún tiempo se hará esto imposible. Se verá obligado á estar siempre acostado, porque la articulación se ha puesto muy dolorosa; ordinariamente la pierna se dobla cada vez más sobre el muslo, máxime después de las exacerbaciones subagudas. En este período algunas partes de la articulación se ponen más dolorosas en los bordes interno ó externo, y hasta en la

Respecto á los fenómenos locales, dice Billroth, ciertos músculos se hallan en un estado de contracción casi permanente, para evitar sus dolores, el enfermo contrae, según los casos, los músculos flexores de la rodilla ó los aductores y rotadores de la cadera Estas posiciones anormales, más o menos pronunciadas según los sujetos, pueden corregirse al principio merced á la narcosis cloroformica, pero al cabo de algu nos meses ó años se desarrollan en las aponeurosis y en los músculos retracciones que sólo ceden empleando cierta fuerza Cuando la extremidad enferma ha estado inerte mucho tiempo los músculos se atrofian por la degeneración grasosa y la retracción cicatrizal. La cápsula articular, que estuvo muy infiltrada é hinchada y los ligamentos accesorios se retraen también, sobre todo en el lado hacia el cual se ha doblado.

Es bastante raro que la enfermedad comience por un derrame seropurulento en la articulación (sinovitis catarral, blenorreica). Los síntomas iniciales son entonces semejantes á los de la hidropesía articular crónica.

Expuestas las anteriores generalidades, corresponde hablar de la anatomía patológica de la si

novitis.

Lo primero que aparece es la hinchazón y rubicundez de la membrana sinovial; ésta se encuentra modificada hacia las partes laterales de la articulación, en los pliegues y en las prolongaciones; sus franjas hinchadas, algo oblongas, pero blandas é imbibidas; toda la membrana se distingue y se separa entonces con más facilidad que en estado normal del tejido sólido de la cápsula La sinovia no suele aumentar, pero es turbia y parecida quizás al moco pus. Poco á poco las alteraciones de la sinovial adquieren mayor intensidad; se torna más gruesa, edematosa, blanca y roja; las franjas se convierten en gruesos rodetes, y en algunos puntos se ven ya gra. nulaciones fungosas El cartílago pierde en la superficie su brillo azulado; sin embargo no está todavía muy enfermo, pero las excrecencias de la membrana sinovial comienzan á deslizarse entre dos superficies cartilaginosas opuestas Durante este tiempo la cápsula articular ha engrosado también, tomando aspecto lardáceo uniforme y edematoso; este tumefacción y el edema se extienden progresivamente al tejido celular subcutáneo y á la piel.

Entre las modificaciones ulteriores, merecen especial mención las del cartílago; las vegetaciones de la sinovial, esa masa de granulaciones fungosas y rojizas, se extienden paulatinamente por encima de la superficie del cartílago y concluyen por cubrirle por completo como un velo (Billroth), si se intenta levantar este velo se le encuentra muy adherido en ciertos puntos donde las vegetaciones forman prolongaciones que

se introducen hasta el espesor del cartílago. Después la vegetación fungosa penetra hasta el hueso y comienza a destruirle á su vez, se desarrolla una caries fungosa, el hueso es reabsorbido en virtud de la neoplasia inflamatoria crónica. Hay, pues, en esos casos una transición entre la inflamación articular fungosa y la caries. El proceso morboso puede adquirir mayo. res proporciones en un punto que en otro, destruyendo por ejemplo casi en absoluto un cóndilo, mientras que el otro conserva total o cialmente su revestimiento cartilaginoso En cuanto a las demás partes de la membrana sinovial modificada pueden también vegetar hacia fuera por parte de la cápsula; ésta, el tejido celular subcutáneo y la piel se transforman quizás en masas fungosas, con ó sin formación de pus, y así resultan perforaciones y fístulas qu comunican directamente con la articulación ó con una bolsa sinovial.

par

Corresponde ahora describir esas mismas lesiones, vistas al microscopio. La membrana sinovial consiste en un tejido conjuntivo laxo, provisto de una red capilar de mediana abun dancia y que forma asas más complicadas en las franjas; en la superficie de la membrana existe una capa simple de epitelio compuesto de células poligonales planas, como en la mayor parte de las serosas. El tejido de la membrana se infiltra poco a poco de células, al mismo tiempo se reá blandece, pierde su disposición fibrosa, sus vasos se dilatan y multiplican considerablemente La capa de células epiteliales planas se disgrega; en su lugar se presentan pequeñas células redondas de nueva formación, que bien pronto se confunden con el tejido de la membrana sinovial, cada vez más alterado, y concluyen por ser apenas reconocibles. La membrana sinovial llega á perder poco a poco su estructura primitiva, en virtud de los progresos incesantes de la infiltración plástica. El tejido conjuntivo, lleno de infinito número de nuevas células, se hace cada vez más homogéneo, y, desarrollándose más y más la vascularización, este tejido se parece entonces, desde el punto de vista histológico, al que precede á la cicatrización. A menudo se ven en esas granulaciones fungosas pequeños núcleos blanquecinos, constituídos unos por tejido mucoso, otros por verdaderos tubérculos miliares (Köster), 'masas de elementos redondos, de naturaleza epitelial, en medio de las cuales no es raro encontrar una célula gigante.

á

La importancia de la sinovitis fungosa, de la osteitis y de la periostitis de ese grupo de afecciones similares que se designan con el nombre defectuoso de tuberculosis local reside en el hecho de que á cada momento esas afecciones pueden engendrar una tuberculosis generalizada, aguda ó subaguda, ó bien una afección tubercu losa de un órgano importante (pulmones, meninges, cerebro, etc.), cuando es reabsorbido el virus y existen en los órganos internos condiciones favorables para su desarrollo. Procesos patológicos análogos se observan en la superficie del cartílago, sobre todo en los puntos en que se halle cubierto por la vegetación fungosa; las células cartilaginosas comienzan por dividirse rápidamente, mientras que la substancia hialina intercelular se funde y se disuelve.

El curso de la sinovitis es muy variado, pero siempre crónico, pudiendo prolongarse la enfermedad meses y aun años enteros, y ofreciendo á veces remisiones y en otros casos exacerbaciones. La curación puede observarse en los diferentes períodos; si sobreviene en el primero puede ser completa, es decir, que se restablece en absoluto la movilidad de la articulación; ó incompleta, y entonces queda siempre mayor ó menor rigidez.

El tratamiento, como en todas las inflamacio nes crónicas, es á la vez general y local. El primero es siempre importante, tanto más cuanto más crónica y lenta sea la enfermedad. La nutrición del paciente, su anemia, su higiene general y su dietética proporcionan valiosas indicaciones al práctico. En cambio la terapéutica local será tanto más activa cuanto más agudo el proceso patológico. No suele ser muy difícil calmar las exacerbaciones subagudas ó los comercios subagudos de la sinovitis. Con tal objeto se emplearán, entre otros medios, la pomada de nitrato de plata (5 por 50 de manteca), las embrocaciones con tintura de iodo, los vejigatorios volantes, el hielo, las envolturas húmedas, la compresión moderada con vendas, todo ello unido al reposo absoluto de la articulación, lo

cual se consigue por la permanencia en la cama cuando se trata de las extremidades inferiores. Respecto a las prácticas de masaje en los comienzos de la sinovitis, andan bastante divididos los cirujanos. Billroth cree que debe recurrirse á ellas con precaución y que no han de ser muy intensas, porque favorecerían la supuración. Debe hacer el amasamiento un médico hábil familiarizado con este método; en tales manos esas maniobras serán seguramente ventajosas.

Si la sinovitis no ha mejorado al cabo de algún tiempo es conveniente el empleo de un apósito sólido, enyesado, á fin de ejercer sobre la membrana tumefacta una compresión constante, moderada, y obtener al mismo tiempo una inmovilización completa. Después de aplicar el apósito enyesado, los enfermos de caries de las extremidades inferiores, sobre todo los niños, pueden pasear, sin que les cause ningún dolor, sosteniéndose con un bastón ó con muletas. Esto tiene dos ventajas: impedir la atrofia de los músculos de la extremidad afecta y facilitar á los pacientes que respiren aire puro. Antes de aplicar el apósito se puede friccionar fuertemente el miembro con ungüento mercurial, colocar un emplasto mercurial, ó hacer una fricción con pomada de nitrato argéntico.

mo es un poco más estrecho que los otros, está
ligeramente escotado, y lleva por debajo una
corta prolongación anal carnosa y retráctil; los
nueve pares de estigmas están situados: el pri-
mero cerca del borde posterior del protórax, y
los demás corresponden á los ocho primeros seg-
mentos del abdomen, el cuerpo de la larva es de
color blanquecino lívido, con la cabeza, la cara
superior del protórax y del último segmento ab-
dominal de color negro luciente. Cuando esta
larva va á sufrir el cambio en ninfa se intro-

duce en unas galerías que construye en el suelo,
realizando este cambio en medio del detritus de
estas galerías.

El tipo de este género es el Sinoxylon sexden-
tatus Ol., de pequeño tamaño, de color comple-
tamente negro, y se encuentra repartido por to-
da la parte meridional de Europa.

SIN-PU-UAN: Geog. C. del dep. de Han-chung-
fu, prov. de Chen-si, China, sit. á orillas del
Han-Kiang, afl izq del Yang-tse-Kiang, á 25
kms. de sus fuentes y á 6 000 m. de alt. Es el
punto extremo de navegación del Han, y por
hallarse en el cruce de varias carreteras tiene
gran importancia comercial.

SINQUITA (del gr our con, y xTwv, túnica):
f. Zool Género de insectos del orden de los co-
leópteros, familia de los colídidos, tribu de los
sinquitinos. Los caracteres más importantes que
distinguen este género son los siguientes: men-
lengüeta córnea y sinuada por delante, el lóbulo
ton corto, con una escotadura ancha y profunda;
interno de las maxilas pequeño y provisto por
dentro de cilos espinosos el externo más ancho
y más largo y ciliado en su extremidad; el últi-
mo artejo de los palpos de forma ovalada y ob.
tuso en su extremo, las mandíbulas terminadas
por una punta simple; el labro transversal y
cortado rectamente; cabeza corta y un poco en-
sanchada al nivel de las antenas; el epistoma
los ojos redondeados y gruesos; las an-
tenas de 10 artejos: los dos primeros muy grue-
sos, los siete siguientes se acortan y engruesan
poco a poco, el último forma un grueso botón
á
globuloso, un poco comprimido, glabro en su
base y pubescente en su extremidad; el protórax
un poco más estrecho que los élitros y casi cua.
drado; el escudo en forma de un cuadrado trans-
versal; élitros muy largos y paralelos; patas cor-
tas; fémures algo gruesos; tibias lineales y ter-
minadas por dos pequeñas espinas; el tercer ar-
tejo de los tarsos más corto que los dos primeros,
y todos ellos guarnecidos de pelos por debajo;
los segmentos abdominales no escotados por de-
trás; el cuerpo lineal, muy convexo y guarnecido
por encima de cilos cortos.

Muchos son los aparatos especiales que la Ortopedia ha ideado para ese objeto; pero si el ci rujano posee alguna experiencia é imaginación, podrá, con férulas, suturas metálicas, apósitos enyesados poco costosos, imaginar procedimien tos que sustituyan á aquéllos. Todos los medios contentivos, los vendajes enyesados y de extensión, los aparatos protéticos, etc., exigen una vigilancia continua por parte del médico, para que no produzcan úlceras por la presión y el roce y para que sus movimientos no den lugar á accidentes. Como es difícil, sobre todo para las clases poco acomodadas, que las familias del paciente sigan esos tratamientos con perseve-escotado; rancia, se puede aconsejar la asistencia en un hospital ó un Instituto ortopédico, hasta que haya desaparecido todo peligro de deformación. SINÓXILO: m. Zool. Género de insectos del orden de los colcópteros, familia de los bostríquidos, tribu de los bostriquinos. Sus caracteres más importantes son los siguientes: órganos bucales más o menos vellosos; menton triangular y transversal; lengüeta sinuada por delante; el último artejo de los palpos subcilindrico y truncado en su extremo, el de los labiales más corto que el de los maxilares; las mandíbulas simples en su extremidad y provistas de un diente pequeño interno; labro pequeño, muy redondeado y ciliado por delante; la cabeza subcilíndrica y alargada; el epistoma cortado rectamente en su parte anterior; los ojos distantes del protórax, redondeados y salientes; las antenas tienen 10 artejos: el primero y segundo son por lo menos tan largos como los cinco siguientes; su maza antenal es más grande que el tallo; el protórax transversal, convexo, más ó menos tuberculoso ó áspero por delante, generalmente provisto á cada lado de una espina encorvada; sus ángulos son redondeados; el escudo en forma de un triángulo truncado por delante y en su extremo; los élitros alargados, cilíndricos, truncados y dentados en su extremidad; las tibias unas veces dentadas y otras inermes; los tarsos normales, su quinto artejo provisto de un oniquio.

Estos insectos tienen sus larvas alargadas, poco convexas por encima y de consistencia más bien carnosa que coriácea; su cabeza es un poco deprimida y con las suturas de la placa cefálica muy distintas; el labro es semicircular y ciliado por delante; las mandíbulas son cortas, anchas, arqueadas y bífidas en su extremidad, las maxilas son muy fuertes y terminadas por un lóbulo ancho, redondeado y provisto anteriormente de cilos espiniformes; sus palpos se componen de tres artejos, de los que el segundo es el mayor; el menton es algo órneo; el labio inferior escotado y provisto de palpos de dos artejos; las antenas tienen cuatro artejos: el primero es corto, grueso y poco contráctil, el segundo es más delgado y un poco más largo, y el cuarto lleva un pelo largo. Debajo de estos órganos se ven, á cada lado, seis ocelas divididas en dos grupos de tres, uno superior y otro inferior; el protórax es mayor que los otros dos segmentos torácicos y un poco estrechado por delante; los segmentos abdominales son más anchos que largos; el últi

El tipo de estos insectos es la Synchita juglandis Fab., propia de Europa, de pequeño tamaño; vive exclusivamente debajo de las cortezas y está cubierta por encima de tuberculitos dispuestos en series sobre los élitros.

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y unas veces está recubierto de piel fina, unifor me, otras de placas córneas sobre los segmentos torácicos; la cabeza lleva en cada lado cinco oce. las dispuestas en dos series, la anterior de tres y la posterior de dos; las antenas se componen de cuatro artejos. El último segmento abdominal lleva un escudo córneo provisto de dos puntas encorvadas, y termina en tubo anal muy

corto.

Esta tribu es la más rica de toda la familia, sus especies son raramente de forma alargada, y muchas de ellas son notables por las asperezas, los cilos, las espinas ó los tubérculos con que guarnecen sus tegumentos. Contiene unos 25 géneros, repartidos por casi todas las partes del mundo.

SINQUITRIO: m. Bot. Género de plantas (Synchytrium) perteneciente al tipo de las talofitas, clase de los hongos, orden de los oomicetos, familia de los quitridináceos, cuyas especies viven en las células epidérmicas agrandadas anormalmente de las partes verdes de diversas fanerógamas, sobre las cuales parecen entonces verruguitas amarillas ó rojas. La espora movible (zoogonidio) se convierte en un soro ó masa globulosa de células poliédricas, que aislándose más tarde se convierten en otros tantos esporangios que producen numerosos zoogonidios persistentes, los cuales pasan el invierno en estado de vida latente, enquistadas, con episporio de color obscuro y endosporio tierno é incoloro, dentro de los cuales se encuentra un protoplas ma oleoso. Las formas de este género se han divido en dos series, según el color amarillo ó blanquecino del protoplasma.

SINRAZÓN: f. Acción hecha contra justicia y fuera de lo razonable ó debido.

... no trataba de poner en ejecución la or. den de Diego Velázquez ni queria que por su mano se obrase una SINRAZÓN tan conocida. SOLÍS.

Pedis una SINRAZÓN
Siendo notorio que he sido
Primero en la pretensión.

RUIZ DE ALARCÓN.

La facultad de dañar
Gana de dañar despierta,
Y, por no hacer SINRAZONES,
Vale más el padecerlas.

HARTZENBUSCH.

- A SINRAZÓN: m. adv. ant. INJUSTAMENTE. SINSABOR: m. DESABOR.

... tenían á menor inconveniente (los de Tlascala) sufrir el SINSABOR de sus manjares que abrir el comercio á sus enemigos.

SOLIS.
-SINSABOR: fig. Pesar, desazón, pesadumbre.
Si tú mi dicha labras,

No temas SINSABORES...
BRETÓN DE LOS HERREROS.

SINSHEIM: Geog. C. cap. de dist., círculo de sit. á orillas del Elsenz y en el f. c. de NeckarHeidelberg, Gran Ducado de Baden, Alemania, gemund á Jagstfeld, 3000 habits. Ruinas de una abadía del siglo XI. En esta c. derrotó Turena á los imperiales el 16 de junio de 1674. En 1689 fué casi destruída por los franceses.

SINSONTE: m. Pájaro cantor de América, del género de los mirlos.

SINQUITINOS (de sinquita): m. pl. Zool Tribu de insectos del orden de los coleópteros, familia de los colídidos. Está compuesta esta tribr de insectos de pequeño tamaño que presentan los siguientes caracteres: lengiieta y menton córneos; dos lóbulos en las maxilas con la extremidad de éstos, guarnecida de cilos y con un diente córneo generalmente en el interno; los palpos labiales y maxilares son muy cortos, y el número de sus artejos es de tres en los primeros y cuatro en los segundos; las mandíbulas son muy cortas, poco visibles, robustas, y provistas en su base interna de un apéndice membranoso; el labro es pequeño en todas las especies; las antenas están insertas inmediatamente delante de los ojos y recubiertas en su base por los bordes laterales de la frente. En muchas especies pueden replegarse las antenas debajo de la cabeza, y en este caso su artejo basilar queda recibido en un surco colocado entre los ojos y los lados del cuadro bucal. El número normal de artejos de las antenas es de 11, terminando por una maza en forma de botón; las patas son cortas; las tibias casi lineales; los tarsos de cuatro artejos simples; el abdomen está compuesto de cinco segmentos, de los cuales los dos últimos Esta ave se halla al mismo tiempo en el conó solamente el último es móvil. En el estado tinente septentrional de la América y en las perfecto estos insectos viven debajo de las cor- Antillas. Es muy común en la isla de Santo Dotezas ó en el interior de la madera en vías de mingo, encontrándose también en la de Cuba. descomposición; sus larvas son poco conocidas Casi siempre vive en las sabanas, no lejos de las para que se las pueda asigar caracteres definiti-habitaciones, pues es muy afecto á la sociedad y vos. Sin embargo, se sabe que su cuerpo es largo, parece complacerse en anidar cerca de los para

- SINSONTE: Zool. Nombre vulgar con el que en la isla de Cuba se designa al Orpheus poly glottus, ave del orden de los pájaros, familia de los túrdidos, que se caracteriza por tener los ojos amarillos; cejas blancas; todas las partes superiores gris moreno muy pálido, más intenso sobre las alas, cuyos remos primarios y secundarios son blancos hacia la mitad de sus extremos. Algunas cobijas superiores ofrecen la misma distribución de color; el pliegue del ala blanco; la rabadilla gris azul; lo inferior del cuerpo casi blanco; cola morena, con una mancha blanca hacia la extremidad de las timoneras (Véase el grabado del artículo BURLÓN).

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SILLA DE MANOS DE FELIPE V. EXISTENTE EN LAS REALES CABALLERIZAS

(La corona se añadió en uno de los reinados siguientes)

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